Phil Spector es una leyenda del rocanrol. Es el productor más famoso de la historia, responsable de algunas de las más bellas y excitantes grabaciones de la música moderna del siglo XX.
Ahora, fiel al modo de vida de los ídolos, después de dar su talento a la humanidad se precipita en una decadencia estúpida. Acaba de ser declarado culpable de asesinato, pero es que lleva años presa de una manía persecutoria que auguraba un final así. Ya hace mucho tiempo que circulan anécdotas sobre la facilidad que tenía para empuñar la pipa -que no abandonaba ni para dormir- y apuntar en la cabeza a sus estrellas (se cuenta que amenazó así a Lennon, a Leonard Cohen y a Dee Dee Ramone).
Dicen que nadie quiere trabajar con él, y me pregunto por qué será.
pd- por cierto, que buscando enlaces para acreditar esta historia, he descubierto el blog anecdotario del rock, que contiene fanegas de alimento espiritual para mitómanos del rocanrol, como tú y como yo.
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